El la actualidad hay gran demanda por los procedimientos estéticos y modificaciones corporales  (temporales o definitivas) inyectando sustancias de relleno en algunas partes del cuerpo para aumentarlas, realzarlas o corregir los efectos del envejecimiento. Esta es una práctica estética válida, en las manos correctas, y con las preparaciones aprobadas por organizaciones sanitarias reconocidas como la FDA (Federal Drug Administration). La toxina Botulínica, el Bótox, es inyectable pero su mecanismo de acción es diferente y no se contemplará en este artículo

Glúteos, rostro, mamas y genitales son las regiones modificadas con mayor frecuencia. Las mujeres son la principal clientela pero una cantidad cada vez mayor de hombres está utilizando estos servicios

Existen sustancias clínicamente aprobadas para ser inyectadas en el ser humano con fines estéticos, pero pueden ser costosas y deben ser aplicadas exclusivamente por médicos especialistas. Los efectos estéticos de varias preparaciones aprobadas son maravillosos, dan lozanía al cutis, remueven arrugas y deformidades cosméticas faciales, rejuvenecen facciones, remueven años de edad en la apariencia, no requieren anestesia ni uso de quirófanos, corrigen deficiencias anatómicas y mejoran el autoestima…

No debemos satanizar el uso de inyectables estéticos pero debemos conocer qué sustancias pueden utilizarse con seguridad y además, debemos usar los servicios de Especialistas idóneos y de reconocida formación y trayectoria.

Cualquier sustancia inyectable, desarrollada y clínicamente aprobada, está asociada con una serie de efectos indeseables conocidos, infrecuentes, leves en su mayoría y rara vez severos, pero el paciente es informado adecuadamente sobre su ocurrencia:

Efectos secundarios comunes, menores

Hematomas
Enrojecimiento
Edema
Dolor
Alergia
Infección
Nódulos y pápulas
Cambios de pigmentación cutánea

Reacciones severas, raras

Tromboembolismo pulmonar
Shock anafiláctico
Celulitis

Los procedimientos médicos genuinos siguen protocolos y el paciente es ampliamente informado antes de aceptar su aplicación, en pocas palabras, no es engañado, como verás a continuación

Biopolímeros: el problema y los farsantes

Los Biopolímeros son polímeros de Silicón (Polidimetilsiloxano) sin aprobación para uso en medicina, aplicados (inyectados) por personal de dudosa reputación y preparación médica. Han tenido un éxito comercial tremendo debido a su bajo costo como producto y aplicación bajo cualquier condición y lugar.

Existen algunas marcas de Biopolímeros que parecen provenir de laboratorios aprobados por la FDA (Federal Drug Administration) pero son productos ilegales y de origen dudoso. Peor aún, en el afán de buscar mejorías estéticas muchas mujeres han sido víctimas de personal médico y/o charlatanes sin las calificaciones para aplicar estos fraudes cosméticos confiando en la inocuidad del procedimiento y de las sustancias aplicadas. Hemos atestiguado la aplicación de casi cualquier cosa en incautos buscando soluciones estéticas económicas, con resultados desastrosos. El factor común en todos estos casos es la falta de honestidad del operador y la total ignorancia del receptor (víctimas) con respecto a las características químicas y el origen de la sustancia a inyectarse y sobre las complicaciones del procedimiento

Muchas organizaciones han estado alertando al público general y a los proveedores de salud que los Biopolímeros usados en procedimientos estéticos tienen una composición desconocida, esterilidad discutible y provienen de la comercialización ilegal.

Las complicaciones inmediatas pueden ser leves a severas, manifestadas como dolor local o difuso, alergia, infección, hemorragia, hematomas, deformación, tromboembolismo, anafilaxis, sepsis y muerte.

Una vez aplicados, el riesgo para el paciente se torna crónico y las complicaciones pueden ocurrir meses o años después del procedimiento de manera espontánea, por traumas mínimos, inyecciones o tatuajes en el área modificada. Los biopolímeros no se degradan e infiltran los tejidos locales y pueden migrar localmente o hacia órganos distantes (metástasis por biopolímeros)

Eliminar los Biopolímeros es casi imposible ya que invaden los tejidos y la única manera efectiva de hacerlo es mediante la cirugía, que elimina el material nocivo, el tejido sano y el infiltrado, potencialmente generando más deformidad y riesgos de lesión permanente, discapacidad, infección y trombosis pulmonar. Usualmente se requieren múltiples cirugías para corregir los problemas que van apareciendo en el tiempo. Se evita caer en la tentación de eliminar todo el material infiltrante para evitar eliminar excesiva cantidad de tejido sano, se debe esperar a que el material se deposite en lugares localizados que faciliten su extracción.

La felicidad cosmética que trae la aplicación de polímeros dura poco y  puede convertirse en dolor y una vida infernal por años, si la vida no se acaba antes.

Como sentencia estética a recordar: nunca introduzcas en tu cuerpo algo que no sea biodegradable, que no pueda localizarse y que no pueda ser retirado de manera fácil e íntegra.

Dr. Ricardo Gómez, ObsGin